Hay libros que ocupan un lugar permanente en la vida de los lectores, a los que se vuelve de manera constante y que sin importar el paso del tiempo, van conquistando a nuevos corazones ávidos de historias. Sin duda El Principito, del escritor y piloto aviador Antoine de Saint-Exupéry, es una de estas obras. A través de las aventuras de un pequeño príncipe llegado del Asteroide B-612, sus reflexiones acerca del comportamiento de los adultos y sus aprendizajes sobre la amistad, los lazos de amor, la pertenencia y lo verdaderamente importante en la vida, este libro publicado por primera vez en abril de 1943 se convirtió en un clásico de la lengua francesa.