“Dile por fin adiós a Alejandría que se marcha, y sobre todo no te engañes y no vayas a decir que fue un sueño, que se confundió tu oído”. Con un poema de Cavafis se despide León Plascencia Ñol de la ciudad de Seúl, Corea, luego de vivir en ella por cerca de siete meses y narrar su estancia en el libro Seúl es una esquina blanca, de la colección Pértiga, una publicación de la Dirección de Literatura de la UNAM y DGE Equilibrista.