En tiempos de pandemia, el encierro ha modificado nuestras formas de aprendizaje y convivencia social… Videollamadas, horarios modificados y poca movilidad son el pan nuestro de cada día. Para contrarrestar la incertidumbre y el miedo que provoca el encierro, las personas regresamos a las expresiones artísticas. Las ganas de cantar, bailar, hacer yoga o pintar, se hacen presentes.